{"title":"懒惰发现了我","authors":"Francesc Borrell i Carrió","doi":"10.30860/0102","DOIUrl":null,"url":null,"abstract":"La pereza es un regulador conductual de primer orden. La relación que establecemos con la pereza marcará, en parte, nuestra biografía. Rectificar rutinas, decisiones, actitudes…. exige dominarlas, instruirlas, estar alerta a cualquier acto de procrastinación. El entusiasmo que nos provoca un proyecto novedoso, o participar en actividades que nos dan notoriedad, las realizamos sin esfuerzo, (estamos motivados), pero no debilitan la tendencia a holgazanear. En cambio, desmentirnos, admitir errores, programar nuevas actitudes frente a viejos estereotipos, aprender nuevas habilidades, supone doblegar la pereza y, por consiguiente, reforzar la voluntad. Este es el camino para aprender nuevas maneras de colorear la vida. La ociosidad puede ser parte de una vida plena, no así la holgazanería, camino que conduce al tedio y la acedia. Pero, más importante, al analizar cómo actúa en mi este tipo de estados emocionales, (pereza, alegría, rencor, envidia…), descubro parte de la urdimbre que me constituye.","PeriodicalId":103134,"journal":{"name":"Folia Humanística","volume":"57 43","pages":""},"PeriodicalIF":0.0000,"publicationDate":"2024-03-19","publicationTypes":"Journal Article","fieldsOfStudy":null,"isOpenAccess":false,"openAccessPdf":"","citationCount":"0","resultStr":"{\"title\":\"que la pereza descubre de mí\",\"authors\":\"Francesc Borrell i Carrió\",\"doi\":\"10.30860/0102\",\"DOIUrl\":null,\"url\":null,\"abstract\":\"La pereza es un regulador conductual de primer orden. La relación que establecemos con la pereza marcará, en parte, nuestra biografía. Rectificar rutinas, decisiones, actitudes…. exige dominarlas, instruirlas, estar alerta a cualquier acto de procrastinación. El entusiasmo que nos provoca un proyecto novedoso, o participar en actividades que nos dan notoriedad, las realizamos sin esfuerzo, (estamos motivados), pero no debilitan la tendencia a holgazanear. En cambio, desmentirnos, admitir errores, programar nuevas actitudes frente a viejos estereotipos, aprender nuevas habilidades, supone doblegar la pereza y, por consiguiente, reforzar la voluntad. Este es el camino para aprender nuevas maneras de colorear la vida. La ociosidad puede ser parte de una vida plena, no así la holgazanería, camino que conduce al tedio y la acedia. Pero, más importante, al analizar cómo actúa en mi este tipo de estados emocionales, (pereza, alegría, rencor, envidia…), descubro parte de la urdimbre que me constituye.\",\"PeriodicalId\":103134,\"journal\":{\"name\":\"Folia Humanística\",\"volume\":\"57 43\",\"pages\":\"\"},\"PeriodicalIF\":0.0000,\"publicationDate\":\"2024-03-19\",\"publicationTypes\":\"Journal Article\",\"fieldsOfStudy\":null,\"isOpenAccess\":false,\"openAccessPdf\":\"\",\"citationCount\":\"0\",\"resultStr\":null,\"platform\":\"Semanticscholar\",\"paperid\":null,\"PeriodicalName\":\"Folia Humanística\",\"FirstCategoryId\":\"1085\",\"ListUrlMain\":\"https://doi.org/10.30860/0102\",\"RegionNum\":0,\"RegionCategory\":null,\"ArticlePicture\":[],\"TitleCN\":null,\"AbstractTextCN\":null,\"PMCID\":null,\"EPubDate\":\"\",\"PubModel\":\"\",\"JCR\":\"\",\"JCRName\":\"\",\"Score\":null,\"Total\":0}","platform":"Semanticscholar","paperid":null,"PeriodicalName":"Folia Humanística","FirstCategoryId":"1085","ListUrlMain":"https://doi.org/10.30860/0102","RegionNum":0,"RegionCategory":null,"ArticlePicture":[],"TitleCN":null,"AbstractTextCN":null,"PMCID":null,"EPubDate":"","PubModel":"","JCR":"","JCRName":"","Score":null,"Total":0}
La pereza es un regulador conductual de primer orden. La relación que establecemos con la pereza marcará, en parte, nuestra biografía. Rectificar rutinas, decisiones, actitudes…. exige dominarlas, instruirlas, estar alerta a cualquier acto de procrastinación. El entusiasmo que nos provoca un proyecto novedoso, o participar en actividades que nos dan notoriedad, las realizamos sin esfuerzo, (estamos motivados), pero no debilitan la tendencia a holgazanear. En cambio, desmentirnos, admitir errores, programar nuevas actitudes frente a viejos estereotipos, aprender nuevas habilidades, supone doblegar la pereza y, por consiguiente, reforzar la voluntad. Este es el camino para aprender nuevas maneras de colorear la vida. La ociosidad puede ser parte de una vida plena, no así la holgazanería, camino que conduce al tedio y la acedia. Pero, más importante, al analizar cómo actúa en mi este tipo de estados emocionales, (pereza, alegría, rencor, envidia…), descubro parte de la urdimbre que me constituye.