Fenómenos "telepáticos" y angustia de separación

Describiendo un tratamiento caracterizado por su difícil final, el autor se esfuerza en mostrar el impacto dinámico de la separación en fenómenos que pueden verse como “telepáticos”. Llevada a desarrollar un apego inalienable a su analista en la transferencia primaria, la paciente se encontró cayendo en una contradicción con su horror visceral a la dependencia, lo que la llevó a interrumpir el trabajo en progreso. Fue entonces que se dedicó a adivinar el ir y venir de su analista y a cruzárselo en lugares públicos, como para asegurarse de su inmovilidad. Este fenómeno apareció con una frecuencia elevada como efecto de una idealización del objeto materno tendiente a negar el vacío espacio-temporal. El riesgo de que no se repitiera la experiencia de rechazo por indiferencia desencadenó igualmente el despliegue transferencial de una fantasía involucrando un doble, en la que la indiferenciación contrarrestaba la vivencia de separación. Además, un sueño “telepático” vino a confirmar esta relación gemelar ilustrando la negativa de la analizanda de tener que renunciar a su objeto narcisista. Las identificaciones proyectivas, los núcleos aglutinados del Yo tanto como las identificaciones primitivas cruzadas, entre otros conceptos, podrían explicar estos fenómenos de naturaleza proyectiva, pero no por eso, menos reales. Tales mecanismos tendrían la virtud de transmitir pensamientos, cuando las partes indiferenciadas del yo - incluso las partes no nacidas del Self - se activaban en un área potencialmente simbiótica. La contratransferencia del analista, marcada por un sentimiento de despojo, tiende no solo a apoyar esta hipótesis, sino también a proporcionar una explicación parcial. Hasta que el analista pudiera reconocer su nostalgia de una relación simbiótica, debió favorecer la aparición de estos encuentros inesperados que emanaban de una convergencia entre la transferencia y la contratransferencia.