D. Saragaglia (Professeur des Universités, praticien hospitalier, chef de service)
{"title":"Cirugía y traumatismos de la clavícula, incluidas las articulaciones acromioclavicular y esternoclavicular","authors":"D. Saragaglia (Professeur des Universités, praticien hospitalier, chef de service)","doi":"10.1016/S2211-033X(19)42713-8","DOIUrl":null,"url":null,"abstract":"<div><p>El traumatismo de la clavícula está representado principalmente por fracturas, esguinces y luxaciones de sus extremos, es decir, las disyunciones acromioclaviculares (DAC) y esternocostoclaviculares (ECC). Las fracturas del tercio medio de la clavícula no se consolidan tan a menudo como sería deseable (del 7% a más del 30% de seudoartrosis según la serie), y las consolidaciones viciosas no son tan banales como parecen. Así, la tendencia actual es intervenir quirúrgicamente con un medio estable y sólido las fracturas simples muy desplazadas y las fracturas complejas en las que los fragmentos intermedios están verticalizados y a veces amenazan la piel. Las fracturas de los extremos, cuando están muy cerca de las articulaciones acromioclaviculares y ECC, siguen las mismas reglas de tratamiento que las disyunciones. Respecto a las DAC, el tratamiento quirúrgico parece más adecuado para los grados III de Julliard (grados IV y V de Rockwood). Los grados II de Julliard (grados III de Rockwood) pueden tratarse de manera funcional con el conocimiento de que, en caso de molestias posteriores, el tratamiento quirúrgico secundario es tan satisfactorio como el de las lesiones recientes. Los tratamientos quirúrgicos son extremadamente numerosos, pero los tratamientos «modernos» no pueden liberarse de las grandes reglas de esta cirugía: reducción perfecta de la disyunción, estabilización sólida y fiable de la reducción y restauración cuidadosa de la fascia deltotrapezoidea. Las disyunciones ECC son mucho más infrecuentes que las DAC. Las luxaciones posteriores pueden causar compresión de la tráquea, el esófago y, a veces, los grandes vasos. Las luxaciones anteriores a veces son bien toleradas, pero las luxaciones posteriores lo son raramente, lo que a menudo conduce al tratamiento quirúrgico. Las agujas de estabilización deben proscribirse dado el riesgo de complicaciones letales en caso de migración intratorácica. Las técnicas son múltiples y es necesario elegir las que sean susceptibles de ser menos invasivas.</p></div>","PeriodicalId":100451,"journal":{"name":"EMC - Técnicas Quirúrgicas - Ortopedia y Traumatología","volume":"11 3","pages":"Pages 1-16"},"PeriodicalIF":0.0000,"publicationDate":"2019-09-01","publicationTypes":"Journal Article","fieldsOfStudy":null,"isOpenAccess":false,"openAccessPdf":"","citationCount":"1","resultStr":null,"platform":"Semanticscholar","paperid":null,"PeriodicalName":"EMC - Técnicas Quirúrgicas - Ortopedia y Traumatología","FirstCategoryId":"1085","ListUrlMain":"https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S2211033X19427138","RegionNum":0,"RegionCategory":null,"ArticlePicture":[],"TitleCN":null,"AbstractTextCN":null,"PMCID":null,"EPubDate":"","PubModel":"","JCR":"","JCRName":"","Score":null,"Total":0}
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Abstract
El traumatismo de la clavícula está representado principalmente por fracturas, esguinces y luxaciones de sus extremos, es decir, las disyunciones acromioclaviculares (DAC) y esternocostoclaviculares (ECC). Las fracturas del tercio medio de la clavícula no se consolidan tan a menudo como sería deseable (del 7% a más del 30% de seudoartrosis según la serie), y las consolidaciones viciosas no son tan banales como parecen. Así, la tendencia actual es intervenir quirúrgicamente con un medio estable y sólido las fracturas simples muy desplazadas y las fracturas complejas en las que los fragmentos intermedios están verticalizados y a veces amenazan la piel. Las fracturas de los extremos, cuando están muy cerca de las articulaciones acromioclaviculares y ECC, siguen las mismas reglas de tratamiento que las disyunciones. Respecto a las DAC, el tratamiento quirúrgico parece más adecuado para los grados III de Julliard (grados IV y V de Rockwood). Los grados II de Julliard (grados III de Rockwood) pueden tratarse de manera funcional con el conocimiento de que, en caso de molestias posteriores, el tratamiento quirúrgico secundario es tan satisfactorio como el de las lesiones recientes. Los tratamientos quirúrgicos son extremadamente numerosos, pero los tratamientos «modernos» no pueden liberarse de las grandes reglas de esta cirugía: reducción perfecta de la disyunción, estabilización sólida y fiable de la reducción y restauración cuidadosa de la fascia deltotrapezoidea. Las disyunciones ECC son mucho más infrecuentes que las DAC. Las luxaciones posteriores pueden causar compresión de la tráquea, el esófago y, a veces, los grandes vasos. Las luxaciones anteriores a veces son bien toleradas, pero las luxaciones posteriores lo son raramente, lo que a menudo conduce al tratamiento quirúrgico. Las agujas de estabilización deben proscribirse dado el riesgo de complicaciones letales en caso de migración intratorácica. Las técnicas son múltiples y es necesario elegir las que sean susceptibles de ser menos invasivas.