Reflexiones en torno a la política comunicacional en Cuba

La defensa de la identidad nacional en el contexto cubano actual, matizado por una incisiva guerra mediática que pretende desvirtuar nuestros valores, demanda del concurso de los medios de difusión masiva y, además, de una acertada política de promoción institucional. Es inaceptable que Cuba siendo un país que posee un sistema institucional bien articulados, que garantiza el desarrollo y la promoción de nuestros valores identitarios, así como una elevada nómina de intelectuales reconocidos en toda la geografía mundial, adolezca de espacios para el diálogo, el debate, la crítica y la problematización abiertas de nuestro ethos sociocultural. Aun cuando se evidencia cierta “apertura” desde los medios de difusión y las instituciones que favorecen el debate crítico, persiste el criterio dentro de los intelectuales y artistas cubanos con respecto a la necesidad de profesionalizar e institucionalizar la crítica en nuestro país. Nuestro objetivo es llamar la atención sobre la necesidad de que se creen y promuevan espacios para el ejercicio de la crítica en defensa de nuestra identidad nacional. Esperamos sobre todo que se multipliquen en los medios de difusión masiva y las instituciones la presencia de espacios que estimulen el debate y la polémica, que es también una manera efectiva de promocionar y perfeccionar nuestra sociedad y nuestra cultura. No queda otra alternativa que favorecer la crítica como lo que es, “arte dentro del arte”, si queremos transformar nuestra realidad y pluralizar sus accesos.