Sostenibilidad y territorio. Una lectura según las categorías vitruvianas

En arquitectura, el concepto de sostenibilidad a la gran dimensión se expresa en los criterios de organización y gestión del territorio y se refiere al uso del suelo y a sus recursos, a la preservación del patrimonio histórico, paisajístico y natural, al control del sistema hidrogeológico, a las estrategias de desarrollo productivo, cultural y económico. Estas cuestiones, que regulan la ubicación, la construcción y la transformación de enteros asentamientos, infraestructuras, equipamientos y reservas medioambientales, pueden ser controladas desde el acto compositivo, con un enfoque cuidadoso tanto en el plano de la forma cuanto en referencia al espacio y al medioambiente que se modifican. A través de la descomposición de los procesos sintáctico-proyectuales de una serie de proyectos contemporáneos, es posible deducir dentro de ellos la aplicación de las seis categorías vitruvianas que, tendiendo a la optimización del esfuerzo proyectual, se revelan como fundamentos operativos que contienen intrínsecamente los principios auténticos de la sostenibilidad. De hecho, un “componer bien” es un “componer sostenible”, en todas las escalas del construir, ya que engloba en propios gestos también cuestiones de carácter medioambiental, relativas a la economía de los recursos y del espacio y de sus procesos de uso y de modificación.