El apresamiento del Gulnare

Abstract

Durante la fase final de la primera guerra carlista, Ramón Cabrera, generalísimo de los ejércitos realistas de Aragón y Valencia, encargó la compra de 30.000 fusiles en Inglaterra. Dos de esos envíos se perdieron. El tercero, con 8.000 armas, llegó hasta las proximidades de San Carlos de la Rápita en el bricbarca Gulnare. El gobierno cristino tenía conocimiento de ello, y tanto la Real Armada como Resguardo Marítimo mantenían una especial vigilancia. El 7 de febrero, dos faluchos guardacostas, coordinados por el bergantín de la Armada Héroe, capturaron al buque inglés cuando apenas se habían podido descargar cien de dichos fusiles. Esto representó un golpe casi definitivo para la causa de don Carlos en aquel conflicto.