{"title":"Toxoplasmosis en el embarazo. Revisión de caso.","authors":"Stiward Velasco Jácome, Andrea Suárez Chamorro, Maite Pamela Rosero Perlaza, Angie Heeyzarath Zhune Gallegos, Nelly Jazmín Pineda Vega","doi":"10.53358/lauinvestiga.v10i2.857","DOIUrl":null,"url":null,"abstract":" La toxoplasmosis es una infección causada por el parásito protozoario Toxoplasma Gondii, conocida como una de las zoonosis más difundidas en el mundo, durante el embarazo puede conllevar a varias complicaciones. Esta infección puede ser adquirida durante la niñez o adolescencia y permanecer latente, así mismo, durante el embarazo esta infección en la madre puede reactivarse y transmitirse al feto, apareciendo de este modo la toxoplasmosis congénita. Para el diagnóstico de esta infección debemos guiarnos del interrogatorio, pruebas serológicas y hasta pruebas moleculares. En cuanto a pruebas serológicas, se considera el gold standard para determinar esta patología mediante identificación de anticuerpos IgM e IgG. Los anticuerpos IgM serán detectables a partir del día 5 después de la infección, siendo sus niveles máximos en 1 a 2 meses. Por otro lado, los anticuerpos IgG serán detectables después de 1 a 2 semanas de infección, llegando así a niveles máximos entre 3 a 6 meses. La alta avidez de IgG es un sello distintivo de la infección crónica (> 4 meses de edad) y una baja avidez en la gestación temprana esencialmente descarta el riesgo fetal, el manejo confirmatorio se basará en pruebas moleculares de ADN de Toxoplasma Gondi en líquido amniótico. Esta revisión de caso busca evidenciar la existencia de toxoplasmosis en mujeres embarazadas en nuestro entorno, su patogenia, evaluación y manejo, destacando el papel del equipo de salud para disminuir el riesgo de complicación materno fetal tanto prenatales como posnatales.\n ","PeriodicalId":499656,"journal":{"name":"La U investiga","volume":" 11","pages":""},"PeriodicalIF":0.0000,"publicationDate":"2024-01-01","publicationTypes":"Journal Article","fieldsOfStudy":null,"isOpenAccess":false,"openAccessPdf":"","citationCount":"0","resultStr":null,"platform":"Semanticscholar","paperid":null,"PeriodicalName":"La U investiga","FirstCategoryId":"0","ListUrlMain":"https://doi.org/10.53358/lauinvestiga.v10i2.857","RegionNum":0,"RegionCategory":null,"ArticlePicture":[],"TitleCN":null,"AbstractTextCN":null,"PMCID":null,"EPubDate":"","PubModel":"","JCR":"","JCRName":"","Score":null,"Total":0}
引用次数: 0
Abstract
La toxoplasmosis es una infección causada por el parásito protozoario Toxoplasma Gondii, conocida como una de las zoonosis más difundidas en el mundo, durante el embarazo puede conllevar a varias complicaciones. Esta infección puede ser adquirida durante la niñez o adolescencia y permanecer latente, así mismo, durante el embarazo esta infección en la madre puede reactivarse y transmitirse al feto, apareciendo de este modo la toxoplasmosis congénita. Para el diagnóstico de esta infección debemos guiarnos del interrogatorio, pruebas serológicas y hasta pruebas moleculares. En cuanto a pruebas serológicas, se considera el gold standard para determinar esta patología mediante identificación de anticuerpos IgM e IgG. Los anticuerpos IgM serán detectables a partir del día 5 después de la infección, siendo sus niveles máximos en 1 a 2 meses. Por otro lado, los anticuerpos IgG serán detectables después de 1 a 2 semanas de infección, llegando así a niveles máximos entre 3 a 6 meses. La alta avidez de IgG es un sello distintivo de la infección crónica (> 4 meses de edad) y una baja avidez en la gestación temprana esencialmente descarta el riesgo fetal, el manejo confirmatorio se basará en pruebas moleculares de ADN de Toxoplasma Gondi en líquido amniótico. Esta revisión de caso busca evidenciar la existencia de toxoplasmosis en mujeres embarazadas en nuestro entorno, su patogenia, evaluación y manejo, destacando el papel del equipo de salud para disminuir el riesgo de complicación materno fetal tanto prenatales como posnatales.