La renta agraria: un conflicto estructural y centenario en la política argentina (periodo 1995-2019)

Abstract

Argentina no solo es la octava mayor extensión territorial del mundo, sino que sus suelos cuentan con un privilegio natural compartido únicamente con otras tres regiones del planeta. La productividad argentina en costos, obedece principalmente a la excepcional fertilidad de sus tierras, al clima templado y al régimen de lluvias que permitió acumular nutrientes durante milenios. Dadas las características fuertemente agro-exportadoras de nuestra economía, la medición de la renta agraria se convierte en un dato determinante. La renta agraria condiciona el precio de las materias primas utilizadas en los bienes que consume mayoritariamente su población, establece los valores de las canastas alimentarias para referenciar los salarios mínimos y se integra finalmente en las mercancías que se exportan, siendo el sector agropecuario – con alrededor del 60% de las exportaciones - la principal fuente de divisas del país. Este trabajo describe la temprana apropiación de las mejores tierras rurales que llevo a cabo la oligarquía argentina en el siglo XIX, efectúa un cálculo alternativo del monto que representa la renta agraria, y estima la porción que capturaron las discontinuadas políticas de retenciones aplicadas durante el periodo 1995-2019 (Convertibilidad, Kirchnerismo y Macrismo). La clase terrateniente argentina se ha opuesto sistemáticamente a dejar una porción de su renta en manos del Estado. Las retenciones aplicadas en diferentes gobiernos son la razón - explicitada o no - de la confrontación más acérrima desde hace más de 100 años entre los dueños de las tierras y el arco político que los enfrenta periódicamente.