Espacio y tabú

Este ensayo se propone como una introspección en la reflexión semiótica sobre las propiedades retóricas del espacio habitado, desde la postura de lo que se conoce como tabú, término extensamente desarrollado por Sigmund Freud. El espacio habitado, por la exclusividad de su concepción arquitectónica y urbana, relacionada con los discursos sintácticos y formales promovidos por el lenguaje academicista, cierra la posibilidad de ser leído a partir de sus propias prácticas culturales donde pueden ser legibles sus “microdiscursos ocultos”, conforme lo establecen las ciencias del signo como la semiótica y el psicoanálisis. El diseño y los procesos estéticos para materializar el espacio habitado derivan de tipos y caracteres fijos manifiestos en el ejercicio proyectual, es decir, de una sintaxis espacial que conduce a codificaciones racionalizadas. Por esta razón conviene reflexionar sobre los elementos que permitirían reconocer el rol del espacio habitado respecto de los demás sistemas de signos que se forjan a través de las diversas prácticas de la cultura misma